El cantante continua hospitalizado en un centro médico en Bogotá.
Finalmente su manager confirmó que no se trató de un infarto, sino que fue una descompensación debido a una baja de presión, aunque se advierte que hay que esperar los resultados oficiales de los exámenes para determinar que fue lo que ocasionó que el artista no pudiera terminar su concierto en la capital de la republica, y que tuviera que ser trasladado de emergencia a una clínica.
“En el mismo concierto le pusieron oxígeno, un médico que estaba en el presente le prestó los primeros auxilios y luego fue traladado en ambulancia a la clínica Shaio. El maestro amaneció mejor, permanece estable y ha estado consciente. Se rumoraba que se trataba de un infarto, pero no fue así, fue una subida de presión que le dio por la altura de Bogotá”, declaró su representante "el mono Romero".
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